No es muy común llevar hasta el disco de la semana un recopilatorio, pero tratándose de una banda extinta y sobre todo por ser un estilo en sí, creo que mi recomendación debía ir a escuchar lo mejor de toda su carrera.
El Rock Andaluz tomo etiqueta definitivamente con estos sevillanos, y más allá de convertir la música en un gueto marginal para andaluces, traspasó la frontera para encandilar a toda la lengua hispana y con el lenguaje universal de la música a muchas más nacionalidades.
Desde el primer momento que escuché Triana, la palabra dejó de asirse y recordarme al barrio para relacionarla totalmente con la banda; la miscelánea de teclados, guitarras eléctricas y españolas, y sobre todo una voz siempre desde el más allá, dolorida y cálida me enseñaron cual cerca están mis raíces musicales y cuanto le debo a Triana en mi educación musical.
No me hace feliz la injusticia musical a la que han llegado, Andalucía, España, debe mucho a esta formación; cierto es que se le ha valorado y comprendido, pero no puedo mirar hacia otro lado cuando veo la atención y ensalzación de la movida madrileña, promovida por la prensa, cuando la inmensa mayoría de grupos son carne de discos de saldo, y tanto “pegamoide” me pone de los nervios.
El tiempo, siempre justo y definitivo, poco a poco están poniendo en su lugar a aquella “maravilla madrileña” que hoy en día no es más que un producto rancio y sin estilo.
Por el contrario Triana suenan actuales, contundentes, especiales y sobre todo son una brecha musical, única e indescriptible. Un torrente musical con denominación de origen.
Jesús de la Rosa, Eduardo Rodríguez Rodway y el pequeño Tele hicieron las delicias musicales de varias generaciones; muy poco me equivoco si digo que son el mayor y mejor grupo musical de la historia patria, y como su productor decía quien sabe hasta donde podía haber llegado su eco musical si D. Jesús de la Rosa no hubiera dejado huérfano al Rock andaluz en aquella maldita carretera burgalesa.
Por todo esto, reivindico a los autores de El lago, Desnuda la mañana, Tu frialdad... como verdaderos referentes de la música en español.
“Iba la aurora vestida con rayos de sol, y en el cabello prendida llevaba una flor…”
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