martes, 31 de enero de 2012

Crónica de un concierto, Arctic Monkeys (Palau Sant Jordi de Barcelona)

















Uno de mis grupos del momento y que no había tenido aún la suerte de ver en directo, ha visitado este fin de semana nuestro país. Las citas eran el viernes 27 en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid y el sabado 28 en el Palau Sant Jordi de Barcelona. Me decanté por la segunda y allí que fuí para comprobar como se comportan los de Sheffield sobre el escenario.

Nada mas llegar al recinto de Monjuit, me encontré con unas largas y correctas colas que esperaban con impaciencia la apertura de puertas, en las que destacaba la insultante juventud de la mayoria de sus integrantes. Muchas quinceañeras acompañadas de sus padres que me hace pensar por un instante en lo mayor que soy sin haber cumplido los treinta. Y es que este grupo, tiene en su haber ya una dilatada carrera con cuatro muy buenos discos en seis años pero con unos componentes que apenas han cumplido los 25.



















Una vez dentro y consiguiendo una buena y cercana posición para disfrutar del concierto, esperamos apenas media hora y aparece sobre el escenario el encargado de telonear a los monos. No es ni mas ni menos que Miles Kane, compañero de Alex Turner en The Last Shadow Puppets y lider de la desaparecida banda The Rascals, que nos presenta un trozo de su primer disco en solitario "Colour of the trap". Viendo como se maneja este tio sobre el escenario, la calidad del sonido de la banda y de Miles como músico, es cuestión de tiempo el que pase de telonear a encabezar y que se convierta en uno de los grandes de la música británica. A mi me ha bastado escuchar el disco un par de veces y verlo 40 minutos sobre el escenario para ganarme y colocarlo entre los grandes.




















Un ratito de espera para que los pipas quiten los chismes del Sr. Kane y dejen apunto los de Los
Arctic Monkeys, se apagan las luces y la gente se vuelve literalmente loca para recibirlos.

Su lider, Alex Turner, aparece con un nuevo look más Rockabilly emulando al de uno de sus héroes, Richard Hawley. Abren con "Don't sit down cause I’ve moved your chair", carta de presentación de su reciente album "Suck it and see", y convierten en décimas de segundos el Palau en una enorme pista de discoteca "indie". Lo que sigue es un impresionante concierto en el que en apenas una hora y veinte minutos, repasan los temas más potentes y cañeros de su discografía, alternando los temas nuevos, como 'The Hellcat spangled shalalala', 'Brick by brick', con sus primeros éxitos, como 'Brianstorm', ‘The view from the afternoon’ y 'I bet you look good on the dancefloor' (esos nombres largos de canciones). Un pequeño parentesis después de todo esto en el que se van y vuelven al momento para rematar con "When the sun comes down", "Fluorescent adolescent" y por último "505" acompañados por Miles Kane.

Un Alex Turner muy maduro y con poses de Rock Star, acompañado de una banda que baila a su son y en la que destaca el trabajo de su batería, nos hizo disfrutar de un muy buen concierto.

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